¡El rebelde del impuesto sobre la propiedad de Moritzburg lucha por una estación de tren en buen estado!

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Torsten Küllig critica el estado descuidado de la estación de tren de Niedersedlitz y pide a la ciudad de Dresde que actúe con rapidez.

Torsten Küllig kritisiert den verwilderten Zustand des Bahnhofs Niedersedlitz und fordert die Stadt Dresden zu schnellem Handeln auf.
Torsten Küllig critica el estado descuidado de la estación de tren de Niedersedlitz y pide a la ciudad de Dresde que actúe con rapidez.

¡El rebelde del impuesto sobre la propiedad de Moritzburg lucha por una estación de tren en buen estado!

Torsten Küllig, conocido como el rebelde del impuesto sobre la propiedad de Moritzburg, escribió recientemente una carta abierta a la alcaldesa medioambiental de Dresde, Eva Jähnigen. En esta carta se refiere al estado descuidado de la estación de tren de Niedersedlitz, que en su opinión es un auténtico fastidio. Küllig está convencido de que el aspecto descuidado de la estación en temporada alta no sólo sorprende a los residentes, sino que también tiene un efecto disuasorio para los turistas. Estaba con su familia en la Suiza sajona durante el día de Pentecostés y se dio cuenta de los problemas en la estación de tren local. La hija de Moritzburger destacó especialmente la falta de atención, lo que motivó a Küllig a actuar. Deja claro que la responsabilidad de este ámbito es la capital del estado, Dresde, y que la insolvencia no puede utilizarse como excusa para el mantenimiento de instalaciones públicas.

Küllig también tiene una sugerencia concreta para solucionar el problema. “Quince minutos de trabajo con una desbrozadora serían suficientes para eliminar el crecimiento descontrolado”, afirma el activista Moritzburger. Como parte de su carta, pide a la alcaldesa que atienda la situación de inmediato ya que es su responsabilidad. También sugiere que el servicio municipal de control centre su atención no sólo en el estacionamiento ilegal, sino también en el mantenimiento de los espacios públicos y el estado de las zonas urbanas.

Centrarse en el mantenimiento de las zonas urbanas.

La política medioambiental se centra en el mantenimiento limpio de los espacios verdes y de las instalaciones urbanas. En esto encaja el cambio de prioridades en la gestión presupuestaria. Eva Jähnigen, alcaldesa medioambiental del Partido Verde, de 59 años, se enfrenta actualmente a una situación crítica. Su colega en el ayuntamiento Zastrow la acusa de no haber informado al ayuntamiento de que uno de los presupuestos destinados a fuentes debía destinarse a otra parte. El Ayuntamiento respondió a esto y se refirió a una declaración de enero que explica el impacto de los recortes presupuestarios. Sin embargo, el presupuesto para mantener los servicios de seguridad vial y el mantenimiento de espacios verdes es muy limitado.

Los servicios voluntarios, como la explotación de pozos, siempre se llevan la peor parte, mientras que la seguridad vial tiene prioridad. Jähnigen se enfrenta ahora al reto de encontrar el equilibrio entre el ahorro presupuestario y la preservación del verde de la ciudad. Esto es importante no sólo para los ciudadanos, sino también para los turistas, como subraya Küllig.

El verde urbano como tema del futuro

El debate actual se complementa con los proyectos de la Agencia Federal de Medio Ambiente para la promoción del verde urbano. Una herramienta en línea prevista tiene como objetivo mapear los efectos de los espacios verdes urbanos y crear conciencia sobre su valor. El objetivo es generar argumentos para la preservación y expansión del verde urbano y promover su aceptación a través de la participación ciudadana. En el marco del proyecto “Valoración del verde urbano”, se apoya a los municipios para que tengan en cuenta las cuestiones de la adaptación al clima y la biodiversidad.

Estas medidas también son importantes para la ciudad de Dresde, ya que pueden contribuir al atractivo de la ciudad y abrir así una perspectiva completamente nueva sobre el cuidado consciente de los espacios verdes. En su carta, Küllig se ofreció a hacerse cargo él mismo de parte del mantenimiento si el departamento de parques le proporcionaba las herramientas necesarias. Aquí es donde reside ahora la responsabilidad de la alcaldesa Jähnigen: tiene la oportunidad de demostrar que la administración municipal y los ciudadanos pueden trabajar juntos para preservar y promover la imagen de Dresde como ciudad acogedora.