Recetas electrónicas y reimpuestos: farmacias en transición: ¡lo que es importante ahora!

Recetas electrónicas y reimpuestos: farmacias en transición: ¡lo que es importante ahora!

Hay movimiento en el sector farmacéutico: el debate sobre los nuevos impuestos y el paso a las recetas electrónicas muestra dónde está el problema. Ya sea mediante mejoras técnicas o formación en procesos internos, el asesoramiento de expertos es cada vez más importante. El farmacéutico Lobeda subraya la necesidad de un cambio fundamental en la forma de pensar de las farmacias. En lugar de quejarnos de que “las compañías de seguros de salud nos están molestando”, deberíamos esforzarnos por “manejar los fondos sociales de manera responsable”.

Un aspecto importante en esta discusión es la auditoría. Este es un proceso de rutina diario para muchas farmacias. Pero el problema está en los detalles: retrasos de hasta doce meses y la falta de transparencia en la facturación complican aún más la situación. Lobeda señala que la introducción de la receta electrónica trae cambios aquí. Mientras que antes la asignación de reimpuestos era más sencilla, hoy en día a menudo sólo se especifican los IK principales, lo que complica considerablemente la búsqueda en diferentes sistemas de caja registradora.

Retos de las recetas electrónicas

La revolución digital no sólo trae ventajas sino también nuevos desafíos. Aunque la tasa de prescripción electrónica en muchas farmacias ya es del 50 al 80 por ciento, todavía existen puntos débiles. Es positivo que los errores formales clásicos y las temidas “reimposiciones por miedo” se hayan vuelto menos comunes, pero también están surgiendo nuevas fuentes de error. Un área problemática son los títulos de los puestos de trabajo: la información faltante o incorrecta puede generar un alto riesgo de nueva tributación. Alto PTA hoy Estas designaciones son requeridas por la Ordenanza de Suministro de Medicamentos (AMVV), pero a menudo no son claras, lo que genera dificultades en la facturación.

Un ejemplo son los requisitos para especificar el puesto de trabajo para las recetas electrónicas; En este caso, los errores no pueden simplemente corregirse más tarde. Si bien las recetas en papel se pueden solucionar consultando al médico, las recetas electrónicas deben devolverse al consultorio del médico para volver a emitirlas en caso de error. Existe desacuerdo sobre qué títulos de trabajo se requieren realmente. Según la ABDA, basta con la mención “medicina general”, lo que podría resultar prometedor en la práctica.

Procesos internos y elusión de impuestos

Uno de los principales objetivos en el contexto de las reimposiciones sigue siendo evitarlas en la medida de lo posible. Muchos errores surgen de procesos internos y la necesidad de capacitar y adaptar estos procesos es urgente. Lobeda destaca el valor de los procesos organizados manualmente y el uso de software de farmacia. Las mejoras técnicas podrían facilitar la gestión y el procesamiento de las retribuciones.

Otro punto específico que señala Lobeda es la importancia del análisis de la causa raíz de fallas repetidas. Un ejemplo práctico muestra una diferencia significativa en el valor de una receta que contiene carbidopa en comparación con el reembolso; tales discrepancias requieren un examen cuidadoso. Además, la introducción del código hash en las recetas ha mostrado resultados alentadores en la reducción de los impuestos.

También se podría ganar mucho si se tuviera el coraje de abrir la brecha en el control de las reimposiciones, especialmente en el caso de cantidades pequeñas. El desafío sigue siendo diseñar las estructuras internas adecuadamente para garantizar un sistema de farmacia más fluido en el futuro.